Al comprar un bolso o algún artículo de piel siempre te surgen dudas, como por ejemplo: "¿cómo cuidar la piel de mi maravilloso bolso para que me acompañe durante muchos años?" 

En Morgado Piel queremos resolverte ésta y todas las dudas que te puedan surgir, porque al confiar en nosotros en cada compra que realizas, confías en la calidad de nuestros productos. ¡Manos a la obra!

Limpieza regular

    Para el polvo y la suciedad superficial: usa un paño suave y seco para limpiar el polvo de forma regular. Para la suciedad más pegada, humedece ligeramente el paño (nunca lo mojes por completo) y frota suavemente.
    Para manchas pequeñas: si es una mancha de líquido, sécala inmediatamente con un paño limpio para que no penetre. Para manchas de grasa, puedes probar con un poco de talco o maicena, déjalo actuar unas horas para que absorba y luego cepilla suavemente.
    Productos específicos: invierte en limpiadores de cuero de buena calidad. Siempre prueba el producto en una zona discreta primero para asegurarte de que no dañe o decolore el material. Sigue nuestras instrucciones siempre.

Hidratación

    Acondicionador de cuero: la piel, al igual que nuestra piel, necesita hidratación para no resecarse, agrietarse o perder su flexibilidad. Aplica un acondicionador de cuero cada 3-6 meses (o más seguido si el clima es muy seco) con un paño limpio y seco. Esto ayuda a mantenerla suave y a prevenir el deterioro.
    Crema humectante: algunas personas usan una pequeña cantidad de crema humectante neutra para manos, pero es crucial que sea muy poca y que no contenga siliconas ni aceites minerales pesados. Es mejor optar por productos específicos para cuero.

Protección y almacenamiento

    Evita la exposición directa al sol y fuentes de calor: el sol puede resecar y decolorar el cuero. Las fuentes de calor (radiadores, chimeneas) también lo pueden dañar. Guarda tus accesorios en un lugar fresco y seco.
    Protección contra la humedad: la humedad excesiva puede causar moho. Si vives en un lugar húmedo, usa bolsitas de gel de sílice en los armarios o estantes donde guardes tus accesorios. Si se mojan, sécalos al aire libre, lejos de la luz directa del sol y del calor, y rellénalos para que mantengan su forma.
    Almacenamiento adecuado: guarda tus bolsos y carteras rellenos con papel de seda o burbujas para que no pierdan su forma. Usa bolsas de tela transpirables (las que suelen venir con el accesorio) para protegerlos del polvo y los roces. Nunca los guardes en bolsas de plástico, ya que no permiten que el cuero respire.
    Protección contra la lluvia: si sabes que va a llover, considera usar un spray protector impermeable específico para cuero. Esto crea una barrera que ayuda a repeler el agua.

Cuidado con los pequeños detalles

    Evita el contacto con aceites, perfumes y maquillaje: estos productos pueden manchar y dañar el cuero.
    Cuidado con los objetos punzantes: evita que tus accesorios rocen con objetos afilados o ásperos que puedan rayar o cortar el cuero.
    Rotación: si tienes varios accesorios, intenta rotarlos para que ninguno sufra un desgaste excesivo por el uso continuado.

Con estos consejos esperamos que nuestros artículos te acompañen durante mucho tiempo. Confía en la calidad, confía en Morgado Piel.